FSC-CCOO La Rioja | 24 abril 2024.

CCOO contesta a la asociación patronal ASTIC sobre las multas a los conductores

  • En la mayoría de los casos, los conductores son obligados a saltarse los límites de conducción.

Ante las declaraciones de ASTIC que sostiene que son "erróneas" las afirmaciones de CCOO de que la patronal pretende que los conductores paguen las multas por infracciones sobre tiempos de conducción y descanso y uso del tacógrafo, el sindicato recuerda que la patronal lleva años insistiendo sobre este asunto y que, de hecho, se discutió en la negociación del II Acuerdo Marco del Transporte de Mercancías.

28/01/2013.
Camión

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"El argumento de responsabilidad objetiva carece de solidez jurídica puesto que los conductores siguen instrucciones "

El Sector de Carretera de la Federación de Servicios a la Ciudadanía (FSC) de CCOO denunció el 14 de enero que las patronales del transporte por carretera pretendían que los conductores pagaran determinadas sanciones por infracciones sobre tiempos de conducción y descanso y uso del tacógrafo, por estimar que son "negligencias" de los mismos.

La Asociación del Transporte Internacional por Carretera (ASTIC) ha contestado a esta denuncia y sostiene que las afirmaciones de CCOO son "erróneas", puesto que ellos no pretenden que se atribuyan a los conductores estas multas. Sin embargo, al mismo tiempo anuncian que si las sanciones son bajo determinadas condiciones, como incumplir órdenes, entonces sí que apoyan que sean los conductores los que paguen.

CCOO, que rechaza tajantemente esta medida, recuerda que las patronales llevan años insistiendo sobre este tema y que de hecho se discutió en la negociación del II Acuerdo Marco del Transporte de Mercancías, cuando reclamaban modificar en esa línea el régimen de faltas y sanciones. El sindicato añade que la postura de las organizaciones empresariales puede deberse a una mala interpretación del artículo 10 del Reglamento 561, que deja a los Estados miembros la potestad para establecer la corresponsabilidad, pero con cargadores y otros clientes de transporte, ya que son los que pueden condicionar los horarios y tiempos de conducción y descanso, y no con los conductores.

El Ministerio de Fomento ya rechazó la propuesta, pero ahora las patronales están intentando convencer a los diputados para que se incluya en la futura Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres (LOTT), que se está debatiendo este mes. Así, el Sector de Carretera de CCOO acusa a las patronales de tratar de negociar directamente con la Administración, a espaldas de los sindicatos.

CCOO recuerda que, en el supuesto de que los conductores desobedezcan las órdenes del empleador o actúen de forma arbitraria, el empresario tiene a su disposición el régimen disciplinario y sancionador dispuesto en los convenios colectivos de aplicación. Además, considera que, en el caso de que saliera adelante la propuesta de las patronales, el conductor se enfrentaría a una doble imposición de sanciones: la correspondiente por el régimen interno, y además las sanciones económicas que el ministerio o las autoridades de control le impusieran ("directamente", como pretenden las patronales).

Argumentos falaces

Algunas patronales hablan de casos de negligencia. Sin embargo, ASTIC va más allá y afirma que los conductores, en los momentos de enfado con la empresa, se dedican a perjudicarla conduciendo más horas o descansando menos horas. CCOO niega absolutamente que se dé esa situación y recuerda de nuevo que las empresas disponen de un régimen interno de faltas y sanciones del que hacen uso.

ASTIC también afirma que estas prácticas de los conductores "pueden llevar a la empresa a cerrar" y que algunos conductores "pueden ocasionar la pérdida de honorabilidad". Sin embargo, obvia que los ministros europeos de Transporte calificaron el nivel de incumplimiento de los horarios de conducción y descanso y respeto del tacógrafo como "insoportable", y que la situación actual no demuestra que haya mejorado de forma sustancial. Esto ha obligado a los Estados miembros a realizar más controles, así como a denunciar los innumerables métodos que se desarrollan para cometer fraude, como duplicar discos, poner imanes en los digitales, etc.

Tampoco mencionan que la respuesta ante la pretensión de Bruselas de reforzar los controles ha sido que las patronales han convencido al ministerio para reducir las sanciones en el marco de la modificación de la LOTT, aunque sólo las relacionadas con incumplimientos de conducción y descanso. Estas multas se reducen al 30% de las cuantías, a pesar de cambiar la gradualidad de las mismas y de que en el último año aumentara su recaudación un 5%, lo cual refleja que los incumplimientos siguen aumentando.

Para CCOO es de sobra conocido que, en la mayoría de los casos, los conductores son obligados a saltarse los límites de conducción y a restar horas de sueño por imperativos de las empresas o de los clientes. "Pero nos faltan calificativos para nombrar la pretensión de cargar estos incumplimientos sobre los conductores, máxime cuando se pretende que, para ?fastidiar a la empresa?, los conductores conduzcan más y descansen menos", añade el sindicato.

Por otra parte, el Sector de Carretera de CCOO explica que el argumento de "responsabilidad objetiva" carece de solidez jurídica, ya que en ningún otro sector se multa al trabajador por las malas prácticas en la empresa, puesto que los trabajadores siguen instrucciones. No obstante, admite que la práctica de cargar las multas a los conductores existe, sobre todo en el caso de trabajadores inmigrantes y con contratos abusivos, lo que consideran como una de "las lacras del sector, donde es preciso insistir para tratar de erradicar estas prácticas".

En definitiva, CCOO muestra su sorpresa ante la contestación de ASTIC, principalmente "por sus argumentos falaces e insostenibles", e instan a la patronal a reconsiderar su pretensión y retirar la propuesta. Asimismo invitan a ASTIC y al resto de las patronales a reconsiderar "esta absurda discusión" sobre las multas a los conductores y a centrarse en la creación de condiciones para un sector de transporte efectivo, pero con empleo de calidad, con eficiencia, y asumiendo que las malas prácticas existen y hay que combatirlas, pero no justificarlas ni traspasarlas a otros.